Pero Rue McClanahan, quería hacer ese papel de la lasciva bomba sexual sureña.
Quería romper con los registros de esposa bobalicona que había hecho en series como 'Maude' o 'Mama's Family' y que ahora reioteraría haciendo de Rose.
Su agente se lo dejó claro: "O Rose, o nada".
Quería romper con los registros de esposa bobalicona que había hecho en series como 'Maude' o 'Mama's Family' y que ahora reioteraría haciendo de Rose.
Su agente se lo dejó claro: "O Rose, o nada".
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Betty White se sorprendió, pero en el acto puso esos ojos vacíos, como de cordero degollado 😳 y se transformó en Rose Nylund.
Y así estuvo 7 años.
Pues porque el último gran papel que había hecho en TV, diez años antes, era el de presentadora de un show de cocina de aspecto cándido, pero que escondía una mujer egoísta y obsesionada por el sexo.
Y ella siempre era creíble.
En ese momento, hacer de "ninfómana" era una apuesta muy valiente, pero es que todo era osadía en esa sitcom mítica.
Y Betty White no temía los retos. No temía nada, de hecho.
Era una sitcom muy parecida y coetánea de 'I Love Lucy', de Lucille Ball y Desi Arnaz, aunque tuvo mucho menos repercusión.
Contrató al bailarín de claqué Arthur Duncan, algo que no gustó en algunas cadenas del sur de EEUU.
¿Por qué? Porque Arthur Duncan era negro.
"Arthur se queda", les dijo White. Y añadió una frase que se ha hecho célebre: "Live with it" (asumidlo).
Las historias de St. Olav de Rose son patrimonio inmaterial de la humanidad.
Sólo eran tres grandes actrices pasándoselo bien.