Decía Wittgenstein que "los límites del lenguaje son los límites de mi mundo". Y, ciertamente, hay mucho cafre suelto cuyo lenguaje no supera el ¡unga bunga!. Muchos de ellos, para desgracia de nuestra especie, están sentando cátedra en la tele, los periódicos y las redes.
Gente intrascendente, insustancial, que antes toda su capacidad de expresión se reducía al futbol y ahora les han dado la posibilidad de expresarse, en los términos de su incapacidad, sobre política, literatura universal o música clásica.
No saben expresarse de otra manera, por eso son de extrema derecha.
Para tener la posibilidad de expresarse.
No le den más vueltas.
O acogemos su léxico como vocabulario ilustrado o seguirán en Vox para poder seguir expresándose.
Comments
Para tener la posibilidad de expresarse.
No le den más vueltas.
O acogemos su léxico como vocabulario ilustrado o seguirán en Vox para poder seguir expresándose.
Aprendamos